Un sábado cualquiera
pasas por Callao y te encuentras esto: un grupo de personas con pancarta y mesa
de firmas mostrando unas imágenes sobre supuestas torturas y asesinatos por
parte del Partido Comunista Chino. Intrigados, mi amiga Tere y yo buscamos al
máximo responsable de esta protesta para saciar nuestra curiosidad. Aquí tenéis
esta pequeña entrevista que realizamos a Carlos Iglesias, abogado defensor por
los derechos humanos.
¿Con qué intención os
habéis congregado aquí?
Simplemente para defender lo derechos humanos en China y
para defender todas las atrocidades que ha realizado el Partido Comunista Chino
(PCCh) desde hace años contra las personas que tienen creencias religiosas. El
PCCh no permite ninguna creencia espiritual. Persiguen a cualquier fe y muy
especialmente a los practicantes de la antigua enseñanza china llamada Falon
Gong, una enseñanza espiritual milenaria con entre 80 y 100 millones de
practicantes en China.
Entonces es cualquier
fe, ¿no?
Sí, el PCCh impone el pensamiento único. No solo desde el
punto de vista político sino también desde el religioso. Son perseguidos
cristianos, tibetanos, budistas… Y especialmente los que practican el Falon
Gong, insisto.