Miguel Ranz hizo la prueba del Iron Man 70.3 el pasado 5 de octubre. A la semana siguiente se prestaba a que le entrevistara para que yo pudiera contar su historia. Una historia que me fascinó y que necesitaba que más gente conociera. Esta es la primera parte de la entrevista: la preparación.
Estoy con Miguel
Ranz, finisher del Iron Man 70.3 de Lanzarote. Buenas tardes.
Muy buenas tardes.
Bueno, lo primero que
quiero que nos cuentes es qué es un Iron Man, para todo aquel que no lo sepa.
Bueno, pues un Iron Man es una modalidad de triatlón, que
consiste en nadar, correr y montar en bicicleta. Existen diferentes distancias,
desde la distancia sprint, pasando por el triatlón olímpico, al medio Iron Man
(o Iron Man 70.3) y al Iron Man. El medio Iron Man también es conocido como
triatlón de media distancia y el Iron Man como triatlón de larga distancia.
Tu hiciste el medio
Iron Man o Iron Man 70.3. ¿Qué distancias tiene esta modalidad?
En mi caso fueron 1’9 km nadando, 90’1 km en bicicleta y
21’1 km corriendo.
¿Cómo surge todo?
¿Por qué te da por hacer esta locura?
¿Habías hecho anteriormente cosas
parecidas?
Bueno, todo surge porque yo soy una persona que ha corrido
toda su vida, a nivel amateur, claro. Entonces por temas de edad el médico me
recomienda que empiece a hacer natación, para fortalecer la espalda. Me apunto
al gimnasio para hacer natación y entonces por amigos, por gente que también
hace deporte empiezan a proponerme que coja la bici. Lo empiezo a hacer y el
paso inmediato siguiente es plantearme por qué no prepararme una prueba de
éstas. No un Iron Man, pero si un triatlón. Todo esto unido a que Internet hace
mucho daño a veces con muchos vídeos, especialmente del Iron Man y el Iron Man
70.3 de Lanzarote, que tienen detrás un halo de superación, provoca que quiera
intentarlo. Es una mezcla de todas estas cosas